La primera cura para cualquier enfermedad es el descanso. Para descansar, hay que estar relajado o extremadamente cansado. La risa relaja y hace que por un momento te olvides de todo, creando ese ambiente donde los nuevos puntos de vista tienen oportunidades y aquello que te afecta se torna invisible. Pero al igual que el llanto es a veces lo mejor que te puede ocurrir, la risa tiene su cara B. El humor pese a ser saludable tiene un lado oscuro, la seductora opción de reirte del problema y olvidarte del tema. Si nos olvidamos de unos hechos quizá sus consecuencias nos encuentren y el desenlace sea peor.

Cuando uno tiene un problema que no puede solucionar, el humor es un amigo. Para todo lo demás haga algo o usted será parte del problema.
Las viñetas que vemos en los periódicos de algún modo describen que está pasando. Las vemos en la sección opinión y también suelen llamar al sentido humano del humor. Porque somos personas con sentimientos. Porque la realidad que nos llega es convulsionante y los pinza. El humor ayuda. Pero hay un lado oscuro del humor.
Un trabajo jodido esto de dibujar viñetas, ¿cómo atinar con el mensaje? ¿cómo ser constructivo? ¿qué pintar cuando ocurren eventos para llevarse las manos a la cabeza?.
Cuando la realidad es tan fea que no hay quien la vea
Cuando vivía en Finlandia no veía la tele y me atrevería a decir que tal simpleza era saludable. Ver las noticias en la sexta es garantía de mal rollo. Martin Varsavsky dice que no ve la tele y no le va mal.. Por un lado quieres mirarla para supuestamente estar informado y «saber» qué está pasando, por otra parte quieres mirar hacia otro lado pues mirar en ese agujero te resta, te hace daño y te cambia el humor.
Para evitar que los pistones de un motor dañen los cilindros se usa aceite, que sirve de lubricante. Si no hubiera aceite, los cojinetes se destruirían y el motor dejaría de funcionar mas bien pronto que tarde.
Tengo la sensación de que las viñetas son como el aceite. Tengo la sensación de que se crean para hacer mas dulce la cochina realidad que a veces nos toca ver. Una realidad dificil de tragar por lo que parece ser necesario digerirla con un poquito de lubricante para que no raje los sentidos. Por ello muchas viñetas suavizan la realidad a base de ligerezas, tratando asuntos preocupantes de nuestra moderna sociedad con cierta indulgencia. Lo que me preocupa de este camino es que al final hay aún mas confusión, tolerancia y sumisión con lo inaceptable. Al final nos tragamos la realidad con lubricante, que duele menos.

Con todo respeto para los viñetistas en general creo que existe una condición forzosa para ser capaz de hacer humor de asuntos delicados: la ignorancia acerca del dolor del perjudicado.
Una nueva era de viñetas
Afortunadamente los tiempos cambian y poco a poco dejamos de ver viñetas donde aparecen situaciones que enmarcan la aceptación de una realidad (como las anteriores) o no concretan y van a los lugares comunes para pasar a viñetas que te llevan al silencio de la reflexión, a considerar que ese problema tiene que ver contigo mas de lo que te imaginas, a provocar la indignación y el inconformismo cuando la ves. Esas son las buenas viñetas. Cada vez hay mas. Y a mi en los últimos años me asombra El Roto (Andrés Rabajo).
Lo que mas me gusta es que su ingenio no termina en la risa fácil, la media tinta, la condescendencia, la ambigüedad o el popurrí, sino en la reflexión, en la concreción, en el impacto de saber enmarcar una triste verdad, en la indignación, en las ganas de cambiar las cosas. Es posible ver estas viñetas y salir reforzado.
Sin quitar honores a muchos otros viñetistas como JR Mora o Rodera, El Roto consigue que nos tomemos sus viñetas en serio. Así que felicidades por su gran trabajo, y no deje de remover conciencias señor Rabago, este post va por usted.
Si quieres ver mas viñetas, aqui
[youtube]http://www.youtube.com/watch?v=woDRgC2IAKI[/youtube]
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